"Hasta los huesos": ¿Qué dijo la crítica sobre este film de amor caníbal?

Ya está en los cines "Bones and All" ("Hasta los huesos"), la nueva película del director italiano Luca Guadagnino, protagonizada por Timothée Chalamet y Taylor Russell. Esta historia de amor caníbal sigue los pasos de Maren, una joven que está  aprendiendo a sobrevivir al margen de la sociedad, y Lee, un vagabundo con ideas muy intensas que vive marginado.

"Cuando se conocen, se unen en un viaje de mil millas que les lleva por carreteras, pasajes ocultos y caminos alternos en los Estados Unidos de Ronald Reagan. Pero a pesar de sus esfuerzos, todos los caminos conducen a sus aterradores pasados y a una última parada que determinará si su amor puede sobrevivir a su forma de ser", narra la sinopsis.

¿Qué dijo la crítica internacional sobre este nuevo film?

The New York Times (A.O. Scott). "Por espeluznante que sea, 'Bones and All' es menos una película de terror que un romance fuera de la ley en la tradición de 'Bonnie and Clyde' y 'Badlands'. Tienes más miedo de lo que pueda pasar con Maren y Lee que de lo que puedan hacerle a cualquier otra persona. Hay una dulzura en Chalamet y Russell que hace que sea difícil verlos como monstruos, y Guadagnino tiene una visión empática, si no del todo aprobatoria, de sus gustos".

The Guardian (Wendy Ide). "Es una película de carretera de amantes de los forajidos, que comparte ADN con odiseas polvorientas como Badlands y Bonnie and Clyde. El telón de fondo de Bones and All es la década de 1980, la desesperación poética de vagabundos hermosos y desarraigados que toman lo que necesitan para sobrevivir. Lo que distingue a esta película, sin embargo, es el hecho de que Maren (una Taylor Russell magnética) y Lee (Timothée Chalamet) son 'comedores'. Su supervivencia depende de atracones caníbales regulares".

Collider (Brian Formo). "El viaje por carretera de los amantes sigue una sección de construcción del mundo que está lleno de tensión y un estado de ánimo bien ejecutado. La construcción del mundo es el esqueleto de la historia. Los huesos son espeluznantes y la carne es cursi. Es una mezcla que no siempre funciona, pero la química entre Russell y Chalamet es tan fuerte que cada cameo se siente extraño y disruptivo".

Elle (Christina Jean-Baptiste). "Si bien tiene sus momentos de horror, no es una película de terror. No tiene que ver con el valor de shock; en cambio, usa su tiempo para empatizar con una historia de amor imposible entre dos adolescentes que se hacen realidad cuando nadie está mirando [...] Además de todo el asunto de comer humanos, todavía son adolescentes en la forma en que se rebelan, se besan, van a los carnavales, hablan sobre la 'primera vez' del otro, exploran nuevas ciudades, se acuestan en el césped y juegan a fingir hasta que la vida vuelve a ser real. La química de Chalamet y Russell se siente tan tierna como la carne que devoran. Incluso a medida que avanzan los créditos, no puedes evitar sentir por los personajes en los que invertiste dos horas.

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